La presidenta de Consumidores Ecuador habla de la importancia del movimiento consumerista y la necesidad de que los ciudadanos entiendan que no pueden vulnerarse sus derechos como usuarios de bienes y servicios.

Consumidores Ecuador se presenta como una organización de consumidores y usuarios joven pero con mucha fuerza. Sus ganas de crecer y de defender los derechos de los ciudadanos en cuanto al consumo la han llevado a participar en el Programa de Transmisión de Experiencias que la Fundación FACUA desarrolla en Latinoamérica desde 2007. Así lo destaca su presidenta, Rosa Trinidad, en una entrevista ofrecida a la Fundación durante su visita el pasado mes de septiembre a la sede de la misma y a la de la organización FACUA – Consumidores en Acción, en Sevilla (España).

¿Cuál es el peso de las organizaciones de consumidores en Ecuador? ¿Tienen suficiente presión en las políticas que se adoptan por parte del Gobierno?

Se nos toma en cuenta si hacemos incidencia constante y llegamos a alzar la voz. Estar ahí presentes, hacernos notar, estar en los medios, en todas partes donde esté la gente y decirles «esto está mal, tenemos que hacer tal cosa». Es decir, cuando creamos la incidencia y alzamos la voz, se nos hace caso.

Y se nos toma en cuenta cuando debaten. Por ejemplo ahora la Ley de Tránsito, nos invitan a participar, pero porque estamos ahí. Hemos hecho propuesta, se nos ha considerado, pero la Ley de Tránsito en la que estamos ahorita es una ley nueva que se sigue debatiendo. Pero sí, se nos está tomando en cuenta.

¿Cómo diría que es el consumerismo en su país y qué diferencias ha encontrado con el que tenemos aquí en España?

Particularmente estoy asombrada de lo fuerte y lo grande que son ustedes y cómo han logrado esta organización. Y revisando la historia, cómo empezaron, uno ya sabe que se puede empezar siempre.

Nosotros somos un movimiento joven, sumamente pequeño pero muy fuerte. Sí lo puedo considerar fuerte porque tenemos un grupo de profesionales de varias ramas que se unen por el bien común. Nosotros dependemos de nosotros mismos, eso también podría considerarse una debilidad porque todos tenemos nuestros trabajos, pero sacamos tiempo para estar en esto, para reunirnos tanto personal como por internet. Siempre nos reunimos, revisamos, hacemos, por lo menos una vez a la semana tenemos una reunión para ver cómo vamos y qué hacemos. Y obviamente, cuando estamos en procesos, como con lo fuerte que estamos ahora con la Ley de Tránsito, nuestras reuniones son más frecuentes y pueden demorar horas porque debatimos lo que queremos, cómo lo queremos y todas estas cosas.

Nuestros fondos son propios. Damos un dinero que nos mantiene para pagar cosas que van generando gastos de la asociación. No tenemos apoyo del Gobierno. Obviamente, no vamos a tener porque, o sea, por ejemplo en la Ley de Tránsito estamos: «no me gusta esto, porque estás violando mi derecho»; lo de la luz, si pasa algo con este tema está claro que es del Gobierno, así que no me vas a dar dinero para pelearte algo que estás haciendo tú.

También por ahora no tenemos apoyo internacional. Lo que sí debemos es aumentar el número de afiliaciones. Para ello debemos consolidarnos y tener algo concreto. Estábamos pensando más o menos en que deberíamos tener una cuota de unos 100 dólares al año para que nos dé un soporte. Ahora tenemos 50 personas que forman la asociación, entonces necesitaríamos aumentar el número pero que el aporte económico sea de 100 dólares al año para podernos dar cosas, porque aunque nos reunimos en oficina, esta es prestada y ya necesitamos tener un local propio para ir creciendo más.

Página web de la asociación Consumidores Ecuador.

Entonces, en el conjunto de la sociedad esa conciencia consumerista sí existe, ¿verdad?

Sí existe pero necesitamos más personas. Necesitamos multiplicarnos. Queremos multiplicarnos. Más que necesidad es querer.

Queremos multiplicarnos y hacer esta política de «este es mi derecho y no me lo puedes violar», «esto es por lo que te pagué y esto es lo que me tienes que dar». Queremos que todos entiendan que nuestros derechos no pueden ser vulnerados y que no haya problemas en alzar la voz.

¿Qué le ha parecido el movimiento consumerista aquí en España?

Me parece estupendo porque es un trabajo que ha ido creciendo pero que nunca bajó las manos. Es súper bueno lo que ustedes han hecho, es una referencia para nosotros. Vimos cómo han avanzado en tener por ejemplo un archivo escrito, luego digital y tenerlo hasta en la nube. O sea, de no tener un programa a tener uno; de haber empezado por ejemplo en Sevilla, a estar en toda España y ahora tener proyectos internacionales. O sea, es un ejemplo súper bueno.

¿Qué opinión tiene sobre el programa de transmisión de experiencias de FACUA?

Me parecen súper buenos sus ejemplos y sus historias, incluso yo he anotado todas las cosas que me motivan, tengo detalles,… por ejemplo, le decía a Olga -la presidenta de FACUA- que veo que tienen cinco puntos fuertes. Y me dijo: «no son cinco», y cuando me despliega toda esa lista, digo: «verdad, es que no son cinco, son un montón». Y luego te da opciones a más puntos y más cosas donde se puede trabajar. Eso, me encantó.

¿Algún aspecto que le haya llamado la atención de la experiencia de FACUA en el consumerismo?

La Escuela de Formación. Una escuela que te forma para enseñarte todos los detalles del consumidor y todo, yo no la tengo. Entonces me parece súper bueno educar a la gente que trabaja como nosotros, porque si no, cómo saben qué es lo que esperamos de ellos o hacia dónde vamos. Eso sí, es muy importante.

Imagen de una de las charlas que mantuvieron Rosa Trinidad y Carlos Vera, presidenta y dirigente de Consumidores Ecuador, junto a Claudio Boada, presidente de La Unión, con los dirigentes de FACUA y su Fundación.

¿Cómo ve la membresía? ¿Piensa que puede trasladarse a su país? ¿Cómo puede ser acogida?

Creo que a nivel de membresía sí vamos a tener buena opción. Es cuestión de educar a las personas. O sea, no podemos estar en un estado donde se tenga todo paternalista, que mi papá me da todo y yo estoy aquí para recibir, no. Tú tienes que colaborar para obtener un servicio muy bueno, que es lo que nosotros estamos ofertando. Nos estamos armando para ofrecer algo de calidad, como ustedes ofertan, por un módico valor. O sea, si pagas un seguro para algo que no te dan, por qué no vas a pagar por algo que sí vas a tener.

Vas a tener a un grupo de profesionales que van a velar por ti, que te van a decir: «tienes estos derechos». Así como tienes obligaciones, tienes también derechos.

Sí creo que es factible. Es un trabajo arduo, como el de ustedes, que las personas se van a llevar un tiempo. Estábamos hablando para que primero la gente se una, igual que hacen ustedes, luego estén ahí para ver qué pasa y después ellos mismos digan «oye, sí, voy a aportarte porque veo que sí funciona, sí sirve y creo que mi dinero me va a dar un servicio».

¿Qué piensa de la oportunidad de venir a Sevilla (España) para poder ver in situ cómo realiza FACUA su labor de defensa de los consumidores, para ver en la práctica lo que se ha contado en la teoría?

Súper bueno, me encantó todo. Todos los ejercicios fueron buenísimos, ver, hablar,… el programa que han diseñado es asombroso. Ver que si alguien mete un comentario, lo puedes leer tú y que cualquiera de los trabajadores tienen acceso a esa información para que el caso no se pierda. Todas las alertas, el que no se puede pasar más de 10 días en que una persona reciba una contestación. O sea, no es que venga, deja y espere a la bendita de Dios cuando te toque.

Imagínense cuando ustedes nacieron hace 40 años que les hubieran dicho, bueno, pues después de tantos años van a estar como mentores.

Rosa Trinidad durante la visita al Archivo Histórico de FACUA.

Por este programa de experiencias de FACUA ya han pasado otras organizaciones de consumidores latinoamericanas que han implementado en sus países sistemas de membresía exitosos. ¿Cuál cree que será el resultado en Ecuador?

De cara a futuro, obviamente yo soy bastante del vaso lleno, entonces yo sí lo veo exitoso sobre todo escuchando la historia de ustedes, la historia aquí del compañero. Y tenemos la ventaja de que estamos empezando en la era digital, donde tenemos las herramientas a nuestro favor y nosotros las usamos. Porque por ejemplo, tenemos a Carlos que es experto en redes sociales. Entonces cuando ustedes lo ven en el teléfono, está atendiendo lo que dicen y está de una vez subiendo las cosas. De repente está así y esta tomándonos una foto y seguro ya está arriba y ya saben dónde estamos, qué estamos haciendo y por qué estamos y cuál es la finalidad.

La forma en que ustedes tienen de la organización, muchas cosas de las que tienen las vamos a replicar. Como les mencioné antes, la membresía va a ser el mismo trabajo. Un trabajo como hemos venido haciendo: lento pero firme y seguro.

Sí veo un futuro para nuestra organización, la gente está tomando conciencia, en la Ley de Tránsito hemos crecido, tenemos gente que entra en nuestras redes a preguntar o nos llama internamente a los teléfonos que están ahí y dicen: «oigan ustedes, qué opinan de esto, qué opinan de lo otro», y como nosotros tenemos otros puntos que estamos ya desarrollando. Por ejemplo, a nivel de salud tenemos una médica que está en el área de salud y la parte reproductiva y lleva la información y derechos en todo eso. Entonces, tenemos varias áreas en las que estamos.

¿Qué piensa de la labor de la Fundación FACUA de reforzar el movimiento consumerista en Latinoamérica, siendo las protagonistas de esa fortaleza las propias asociaciones de consumidores de los distintos países?

Me parece excelente que se conviertan en mentores ya que la experiencia de ustedes es muy útil y es muy buena de ser replicada con cada una de las características y con los protagonistas de las diferentes zonas. Por ejemplo, nosotros podemos replicar la experiencia de ustedes en nuestro lugar ocupando lo mejor que nos sirva de acuerdo a nuestra área de servicio.

Entonces como ya he manifestado, yo llevo muchos puntos que vi excelentes. No vamos a esperar 40 años para digitalizar nada, o sea, definitivamente no vamos a olvidar pequeños detalles que en el futuro pueden ser el inicio de algo grande. Decir sí, empezamos con las reuniones en casa, vía virtual. Fuimos 10, luego 50. O sea, estos 10 fueron los primeros que cogieron de su bolsillo y dieron una cuota porque sabían que tenía valor.

La experiencia de ustedes, el que sean como nuestros papás después de 40 años exitosos, o sea, bienvenidos.

Deberíamos tomar en cuenta que la historia fue hecha para recordarla, avanzar y en lo más posible no cometer los errores que cometieron los otros, aplicándolos a cada área. Porque estamos en que puede que esto que no te sirvió a ti, sí me sirva a mí. Más que nada, la historia está hecha para eso, para recordar y no repetir los errores.